
En una final electrizante y llena de drama, Botafogo superó 3-1 al Atlético Mineiro y consiguió su primera Copa Libertadores en el Estadio Monumental de Buenos Aires. A pesar de quedar con un hombre menos a los 31 segundos por la expulsión de Gregore, el ‘Fogao’ mostró resiliencia y carácter para coronarse campeón. Luiz Henrique marcó el primer gol a los 34′, y Alex Telles amplió la ventaja de penal antes del descanso.
En el segundo tiempo, Atlético Mineiro recortó distancias con un gol de Eduardo Vargas, pero fallaron múltiples oportunidades para empatar. Finalmente, en la última jugada, Júnior Santos cerró el partido con una genialidad individual, asegurando el histórico título para el Botafogo, que ahora inscribe su nombre entre los grandes de Sudamérica.